Ya en la previa del Mundial de Rusia 2018, un amistoso entre la Selección Argentina e Israel se debió suspender por razones políticas.

Palestina, con una intensa campaña, logró que el partido no se juegue ya que si se hacía, consideraban que era una normalización de la ocupación de la parte de Jerusalén que según ellos, les corresponde.

Ahora, el que corre peligro es el duelo entre el conjunto Albiceleste y Uruguay, que se debería disputar el 18 de noviembre en el New Bloomfield Stadium de Tel Aviv.

Ante el asesinato del líder de la Jihad Islámica en manos del Ejército israelí, llegó la respuesta desde Franja de Gaza, lanzando unos 50 cohetes rumbo al sur y centro del país asiático.

En esas zonas, se supendieron las clases e incluso recomendaron a las personas no ir a trabajar.

En medio de un estado de emergencia, hay muchas dudas sobre si el clásico rioplatense se podrá disputar con normalidad.