Perú ganó y gustó en una noche que quedará grabada para todos los aficionados del cuadro inca, quienes estuvieron alentando durante los noventa minutos a los muchachos de Gareca.
Desde su llegada el mismísimo técnico había señalado que se sentían en casa y las razones eran obvias. Durante la concentración los seguidores hicieron un banderazo con cánticos y banderas.
La fiesta inicialmente se tomó las calles de Nueva Yersey para finalmente trasladarse a las graderías del Red Bull Stadium para vibrar con las emociones del compromiso ante los paraguayos.
Al final del duelo el Tigre volvió agradecer a esa mancha blanquirroja que estuvo presente.
No solo fue eso, el argentino les tiró un centre: "Le dedicamos el triunfo a todos los hinchas que vinieron al estadio y a los que nos ven desde Perú".
