Franco Armani es uno de los arqueros más importantes de la historia de River, luego de haber sido protagonista en varios partidos clave del ciclo más exitoso de su historia. El santafesino tuvo atajadas fundamentales en los encuentros más determinantes del Millonario para la obtención de los últimos títulos bajo la conducción de Marcelo Gallardo.
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Sin ningún tipo de dudas, el año más consagratorio para el arquero de la banda fue el 2018, donde disputó su primera Copa Libertadores con el club y la terminó ganando en la final ante Boca. En ese certamen, Armani tuvo al menos una atajada clave por serie, en la que además del Xeneize se midió con Gremio, Independiente y Racing.
A pesar de haber tenido ese año glorioso, que entre otras cosas lo llevó al Mundial, cuando al arquero le preguntaron por el gol en el que más responsable se sintió, eligió uno de ese 2018 que nadie esperaba.
“Puede ser la de la final contra Boca en 2018, el de pelota parada de Benedetto” , reveló Armani, que explicó el porqué: “Fue un tiro libre muy de lejos, que cayó llovida al área chica. Sentí que verdaderamente tenía que salir”.
Como era de esperarse, al arquero millonario le preguntaron por la jugada desafortunada en la semifinal de ida ante Palmeiras, y fue claro con su postura: “Son malas decisiones, no falta de trabajo o confianza. Esa jugada tuve un poco de mala suerte porque la saco, le queda a Rony en el borde del área grande, patea y le pega a un compañero nuestro. Igualmente no es excusa, podría haberla agarrado con la mano”.