Cuando este tipo de hechos suceden en la cancha es cuando se valida ese dicho de que el fútbol es el deporte más hermoso del planeta. Un simple gesto de humildad para brindar una sonrisa.
Eso fue lo que hizo Juan David Pérez luego de que Millonarios le ganara a Deportivo Pasto en la cuarta fecha de los cuadrangulares finales. El atacante se tomó un momento para hacer feliz a una hincha que no dejó de alentarlo desde la tribuna.
Y no es la primera vez que Juan David Pérez tiene un gesto así con la hinchada. Hace unos meses, el jugador se encariñó con un niño que lo acompañó al terreno de juego en los actos protocolarios. El pequeño nunca se le despegó y lo hizo sentir como su ídolo.
Luego, el jugador se encargó de localizar a su pequeño fanático para visitarlo en su casa. En compañía de sus padres, tuvo otro detalle que lo ha convertido en uno de los jugadores favoritos por la hinchada.