En el duelo entre Uruguay y Chile de ayer por la Copa América, un aficionado se metió al campo de juego y Gonzalo Jara le metió una patada.

Cuando el futbolista de la Roja agredió al hincha, Luis Suárez salió despedido como un loco a gritarle al árbitro.

 

¿Qué fue lo que le dijo? Le pidió la expulsión del volante porque no se puede golpear a un espectador. 

"Le fui a decir que lo tenía que expulsar porque el reglamento te marca eso. No quería sacar ventaja, simplemente que se respete el reglamento", comentó después del duelo el delantero de Barcelona.

Además, Lucho contó qué le respondió el colegiado: "Me dijo que nos estaba defendiendo a nosotros", haciendo referencia a Jara.

Tenía que ser expulsado y Suárez, como siempre, entendió absolutamente todo...