La Copa Libertadores realizó su sorteo y Peñarol está en el Grupo G, con los dos equipos grandes de Paraguay -ambos de Asunción- y Colón de Santa Fe, la otro lado del Rio de la Plata, en cierto modo, el sorteo fue benevolente con el Carbonero.

Es que para Peñarol, como todos los equipos sudamericanos, siempre es un problema de logística coordinar las fechas entre semana por las grandes distancias que hay entre las ciudades en el continente.

Un equipo sudamericano, usualmente supera los 10 mil kilómetros en una fase de grupos y si a los equipos del Rio de la Plata les tocan rivales de Colombia o Venezuela, esto se duplica, por eso tener rivales de países limítrofes o cercanos es un pequeño privilegio que tuvo el Manya.

 

Los viajes a Paraguay

Desde Montevideo, la casa del Carbonero, el cuadro de Peñarol deberá desplazarse dos veces a la capital Paraguaya, en su grupo están Cerro Porteño y Olimpia, dos equipos de Asunción, y aunque cada uno juega en un estadio distinto, la ciudad es la misma. 

La distancia a recorrer entre Montevideo y Asunción es de 1343, de ida y vuelta por cada viaje que haga son 2686, multiplicado por las dos visitas que debe realizar a los grandes del Paraguay, son 5372, estamos hablando de dos viajes de un grupo de cuatro equipo, y apenas superó la media del promedio en viajes de Copa.

El viaje a Santa Fe

Este es aún un viaje más corto, la distancia entre Montevideo y Santa Fe, no llega ni a los mil kilómetros, son 700 kilómetros, 1400 entre ida y vuelta que tiene que hacer el Manya para enfrentar a Colón de Santa Fe.

Los kilómetros que debe recorrer Peñarol

La cantidad total de kilómetros que debe recorrer el equipo uruguayo en toda la fase de grupos es de 6772, muy por debajo del promedio habitual y es que el sorteo también debe deparar suerte, no solo en lo deportivo, también con los destinos, y en este caso, le tocó un grupo con rivales difíciles, pero cercanos.