Mucho se habló de la inactividad de los equipos argentinos en la reanudación de la Copa Libertadores, que se dio incluso antes de la vuelta del fútbol local.

Después de la derrota de Racing en Avellaneda y el empate de River en el Morumbí, le tocó el turno a Boca.

En la Nueva Olla visitando a Libertad, los de Miguel Ángel Russo -hoy los de Leandro Somoza- abrieron el marcador rápidamente.

En el primer ataque del partido, Eduardo Salvio hizo quebrar a la última línea del equipo de Ramón Díaz.

 

Le pegó al arco, la jugada se ensució pero nuevamente el cayó la pelota a sus pies tras un rebote casi en el área chica.

Allí no falló: fuerte y arriba, inatajable para el arquero de Libertad. Seis minutos tardó en ponerse por delante Boca.