Alianza Lima está en crisis deportiva. Después de haber tenido tres buenos años con Pablo Bengoechea, en este 2020 los Íntimos no han podido conseguir resultados positivos.
Recién este sábado, Mario Salas logró su primer triunfo en el torneo local contra el débil Carlos Stein. Entonces, los de la Víctoria pensaron que la racha negativa se había terminado.
En la Copa Libertadores, sin embargo, tenían que romper una maldición aún más fuerte. Desde el 2013, hace 21 partidos, no ganaba en el torneo internacional y este miércoles jugaron contra Estudiantes de Mérida en Matute buscando los 3 puntos.
El partido, de hecho, comenzó de la mejor manera para los Íntimos. Joazhiño Arroé anotó el 1-0 a los 3 minutos y los hinchas pensaron que el día deseadi había llegado. A los 35′, tras un polémico penal, llegó el empate de los venezolanos.
La segunda mitad fue muy mala para Alianza. A los 67′, Ítalo Espinoza se mandó con un error realmente lamentable. Terminó en un penal que decretó el 2-1 para Estudiantes.
Tras eso, presionaron y recién a los 95′ consiguieron el empate. El árbitro pitó el final y Alianza Lima empató el partido en la Copa Libertadores. Ya son 22 juegos sin ganar y están haciendo un récord negativo ¡Mal!