Boca llegó a la tercera fecha de la Zona Campeonato de la Copa Diego Maradona con una sola cosa en la cabeza: la presente edición de la Copa Libertadores de América.
Como consecuencia de ello, Miguel Ángel Russo decidió poner en el campo de juego de la Bombonere un equipo totalmente alternativo para medir fuerzas contra Huracán.
Así fue como, en los primeros instantes del juego, el elenco Xeneize no encontró el rumbo y Huracán tuvo chances para ponerse en ventaja, incluso con un gol mal anulado.
De todas maneras, el anfitrión terminó reaccionando. Sin ir más lejos, se fue al entretiempo imponiéndose por dos goles gracias a dos anotaciones de Ramón Wanchope Ábila.
Luego, ya en la etapa complementaria, la tranquilidad reinó en el equipo conducido por Russo. Manejó los tiempos y no pasó grandes sobresaltos ante el globo.
Para colmo, a los 45 minutos de ese mismo período final, Agustín Obando apareció en escena para colgarla de un ángulo y decretar el 3-0 que luego sería definitivo.