La FA Cup, además de ser el torneo más longevo del mundo, es una fuente inagotable de partidos que son un deleite para el espectador neutral.

Es allí donde los "pequeños" suelen hacerle las cosas difíciles a los poderosos, al punto de muchas veces dejarlos fuera de competencia.

Esta tarde, Barnsley recibía al Chelsea por los octavos de final del certamen. Y los Blues debieron transpirar mucho para meterse entre los ocho mejores.

Tammy Abraham anotó, en el complemento, el único gol de un encuentro más que igualado. 

En el primer tiempo, los locales fueron incluso mejores que su rival, quienes han logrado preservar el invicto de su flamante entrenador Thomas Tuchel.

El próximo 20 de marzo, chocarán ante el Sheffield United con el objetivo de meterse en la semifinal.