El histórico volante germano jugó su último partido con el conjunto nacional y el homenaje fue pleno: emoción, lágrimas y la ovación del Borussia Park.
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Después de 120 partidos, tres participaciones en Copas del Mundo, cuatro en Eurocopas y de levantar un trofeo mundial, Bastian Schweinsteiger le dijo basta a su carrera internacional.
El volante germano jugó su último partido este miércoles, en un amistoso ante Finlandia que acabó con victoria para el local por 2-0. No obstante, toda la atención fue para el capitán.
El hombre del Manchester United se emocionó mucho en la previa del inicio del encuentro, fue ovacionado por todo el Borussia Park de Mönchengladbach y llevado en andas por sus compañeros.