Parece un hecho que Yerry Mina no continuará su carrera en el Barcelona, una vez que regrese de Rusia. El cuerpo técnico del equipo catalán, al parecer, determinó su partida del plantel, recientemente campeón de la liga española. Ciertas dudas en sus actuaciones y su falta de adaptación sentenciaron su futuro.
Mina será cedido a préstamo o vendido tras el Mundial. El Barcelona considera que tiene los puestos cubiertos con Gerard Piqué, Samuel Umtiti, quien recientemente extendió su contrato hasta 2023, y Thomas Vermaelen, al que le queda un año de vínculo.
Además, cobra peso el rumor de que el club irá por el fichaje de Clément Lenglet, del Sevilla. La carrera de la figura francesa seguiría en el Barcelona o en el United de Mourinho.
Sin dudas, Rusia será una buena vidriera para el defensor colombiano, quien dependerá de sus actuaciones con la Selección para continuar su paso por el fútbol europeo. Un dato a tener en cuenta es que el pasaporte le juega en contra a Yerry: Mina llegó al Barça ocupando plaza de extracomunitario.
