Haber sumado seis puntos en nueve jornadas es un porcentaje demasiado pobre no solo para Mónaco, sino para cualquier equipo que se precie de querer quedarse a vivir en la Ligue 1. La situación que tiene al equipo del Principado en zona de promoción para no descender se cargó la cabeza del entrenador Leonardo Jardim, recientemente destituido.

El portugués había llegado al equipo en 2014 y tuvo contacto directo con la gloria al ganar la Ligue 1 en 2017, mismo año en el que accedió a las semifinales de la Champions League.

Pero los malos resultados en el inicio del nuevo curso provocaron que se rompiera con un vínculo cuya extensión estaba prevista hasta 2022.

Ahora Mónaco, equipo que capitanea el delantero colombiano Radamel Falcao García, está en la búsqueda del entrenador que pueda cambiarle el curso a la temporada y el francés Thierry Henry aparece como el máximo candidato al banquillo.