El estadio Rhein Energie de Colonia, Alemania, fue el escenario designado para un encuentro absolutamente trascendental en el marco de la presente edición de la UEFA Europa League.

Allí se encontraron frente a frente dos equipos importantes como Inter de Milán y Sevilla, que salieron al campo de juego con el claro objetivo de buscar el arco contrario desde el primer minuto.

Así fue como se fue edificando un compromiso absolutamente espectacular, con muchos goles y emociones de todo tipo. Y esa tendencia se mantuvo hasta los minutos finales.

Luego de una chilena de Diego Carlos y un tanto en contra de Romelu Lukaku, los de Antonio Conte fueron con todo, incluso desesperadamente, con la meta de estampar una nueva paridad.

Y quien tuvo una oportunidad inmejorable para estampar el 3-3 fue Alexis Sánchez, quien había ingresado al campo de juego minutos antes.

En una jugada muy peligrosa, el atacante chileno impulsó el balón y estuvo a nada de marcar. Sin embargo, Jules Koundé se vistió de héroe y la sacó en la línea.