La serie de octavos de final de UEFA Champions League entre Bayern Munich y Chelsea ya había quedado prácticamente sentenciada luego del compromiso de ida.
Es que, en pleno territorio inglés, la poderosa formación alemana sacó chapa de candidata imponiéndose, nada más ni nada menos, que por 3-0 ante los de Frank Lampard.
Pero esto es fútbol, dinámica de lo impensado, y por eso nada se puede dar por hecho hasta que finalmente suceda. Y así llegó el momento del partido de vuelta.
Este sábado, Bayern Munich se presentó en su estadio con la misión de finiquitar su clasificación hacia la próxima instancia del certamen continental. Y arrancó bien.
A poco de comenzado el encuentro, el árbitro del mismo sancionó un penal en favor del equipo que viene de hacerse con el título en la Bundesliga.
Y quien se hizo cargo del mismo no fue otro que Robert Lewandowski, que lo ejecutó con toda la clase del mundo para poner el 1-0 y estirar el global.