Corría el año 1996. Un joven José Mourinho llegaba al Barcelona junto al inglésBobby Robson. El portugués iba a ocupar el cargo de segundo entrenador. En ese entonces, un Ronaldo de apenas 20 años llegaba desde elPSV como una de las grandes promesas del fútbol mundial.
De izquierda a derecha. José Mourinho, Bobby Robson y Ronaldo
Si bien Mourinho, durante varios años,vio como Cristiano Ronaldo comenzaba a pulirse y perfeccionarse para convertirse en uno de los jugadores más destacados de la historia, el portugués optó por quedarse con lo poco que pudo disfrutar al brasilero.
“Ronaldo es el mejor de siempre. Nunca he visto a nadie como él”, detalló Mou en un documental sobre Bobby Robson, a quien él catalogó como“un padre”.“El del Barcelona fue el mejor año de la historia de Ronaldo”, cerró José dejando entrever que para él no existirá nadie igual.
Mou se quedó con Ronaldo por sobre los demás