Este sábado, Darío Benedetto fue titular en el encuentro del Olympique de Marsella, donde recibió al Metz por una nueva jornada de la Ligue 1.
Aunque el dueño de casa no pudo romper el cero en el primer tiempo, el delantero argentino fue uno de los mejores jugadores.
Primero, de un remate desde afuera del área y a primer toque, casi hace un golazo, pero el balón pegó en el techo del arco del Metz.
A los 38 minutos de juego, Benedetto se paró en el segundo tiempo y se mandó una pirueta bárbara.
El ex Boca le pegó de lleno a la pelota de tijera y casi mete el golazo del fin de semana: la pelota se fue rozando el travesaño.
Sí, si hacía el gol no había más Premio Puskas en la historia. ¡Se agarraron todos la cabeza!
