Después del entrenamiento en Valdebebas, Santiago Solari tenía planeada la formal conferencia de prensa previa a los partidos del Real Madrid.

El entrenador llegó una hora tarde, pidió perdón y soltó una de las frases más duras desde que está en el cargo.

"Pienso que la mayoría de jugadores han estado a la altura del escudo. Los que no han estado se lo he transmitido personalmente", destacó.

Aunque no habló directamente sobre su continuidad, agregó un mensaje que no solo se entiende para su posición: "Todos estamos de paso. Es lo mismo que dije en mi primera rueda de prensa".

Parece poco lo que podrá hacer Solari para cambiar la situación de aquí al final de la temporada.