El PSG no la pasaba bien en Inglaterra tras comenzar perdiendo 2-0 ante el Liverpool por la Champions League.

El descuento había llegado en el primer tiempo y en el segundo, el partido se había frenado en intensidad.

Pero una gran jugada de Neymar llevó la pelota hasta el área y un rebote le dejó el balón en los pies a Mbappé.

El francés no dudó y anotó el empate parcial 2-2, para hacer delirar a su gente y amargar al equipo de Klopp.