El caos rodea al Sporting de Lisboa. El presidente del club, Bruno de Carvalho, anunció la suspensión inmediata de los diecinueve jugadores que se habían mostrado en desacuerdo con sus críticas tras la derrota ante el Atlético Madrid por la Europa League.
Inmediatamente después de ese tropezón, el mandatario había expresado en su cuenta de Facebook que esperaba "un equipo concentrado", pero que en su lugar se encontró con "Un equipo con actitud, pero con una defensa que no ha estado concentrada".
Esto llevó a que el portero Rui Patricio saliera a responder con firmeza en Instagram, con adhesión de otros diecinueve compañeros. "En nombre de todo el plantel, reflejamos nuestro desagrado al escuchar las declaraciones de nuestro presidente después del partido de ayer, en el que obtuvimos un resultado que no queríamos", comienza diciendo el comunicado. Y tras reprochar la ausencia de apoyo de quien debería ser un líder, el portero agregó: "Todos los asuntos se resuelven dentro del grupo".
Pero a Bruno de Carvalho no le cayeron nada bien estas palabras y su contraataque fue lapidario, incluso para el entrenador Jorge Jesús, quien prácticamente se quedó sin equipo para los próximos compromisos. "Mis chicos amados, esto lo vamos a resolver. Todos los atletas que firmaron el comunicado serán suspendidos y tendrán que afrontar la disciplina del club. Ya estoy harto de las actitudes de los niños mimados que no respetan nada ni a nadie", sentenció el presidente.
Según el diario Record, están suspendidos: Rui Patrício, William Carvalho, Bruno Fernandes, Battaglia, Piccini, Palhinha, Coates, Acuña, Gelson, Podence, Bruno César, Montero, Bryan Ruiz, Rúben Ribeiro, Rafael Leão, Doumbia, Wendel y Coentrão.
