Apenas fue un consuelo para el Zenit ruso, que en el partido de ida del partido correspondiente a la tercera ronda clasificatoria a la fase de grupos de la Europa League había caído 4-0 ante el Dinamo Minsk.

En la vuelta, Leandro Paredes abrió el marcador para su equipo haciendo gala de su gran pegada, con un golazo de tiro libre desde una posición imposible para una gran mayoría de futbolistas.

El 1-0, sin embargo, le quedó muy pequeño a un Zenit que la semana pasada fue vapuleado en Bielorrusia, hipotecando sus posibilidades de seguir en carrera en la competición europea.

Paredes fue el único de los futbolistas argentinos del Zenit que ingresó como titular, mientras que Driussi y Kranevitter estuvieron en el banco de suplentes. También saltó al campo desde el inicio el ecuatoriano Christian Noboa.