El partido que el Sport Recife disputó en el Estadio Rei Pelé este miércoles cinco de julio frente al Clube de Regatas de Brasil correspondiente a la jornada 15 de la Serie B del Brasileirao, quedó marcado por una situación insólita que seguramente formará parte del recopilado habitual de los bloopers del año en el mundo del fútbol.

El conjunto de Pernambuco llegaba al encuentro en cuestión con las chances de seguir puntero en soledad porque Vila Nova, su principal competidor en la cima de la tabla de posiciones, el sábado empató 1 a 1 con Atlético Goianiense. Ambos quedaron con 31 unidades, por lo que una victoria le aseguraba sacar tres puntos de ventaja.

Pero nada de eso pasó. Principalmente, por los errores que cometió Sport Recife ante Clube de Regatas (elenco que se ubica decimoprimero en la clasificación y que apenas suma seis triunfos sobre 15 partidos disputados), como el que protagonizó el portero Jordan Esteves da Costa Daniel, que hizo todo lo posible para que su equipo pierda el cotejo.

Resulta que se jugaban 40 minutos del segundo tiempo y Sport Recife buscaba la igualdad (caía 1 a 0 con el tanto de Anselmo Ramón). En un intento de controlar el balón y salir jugando desde el fondo, el volante Luciano Batista da Silva confió en su arquero dándole el pase hacia atrás pensando que lo iba a poder controlar, algo que nunca sucedió.

Jordan Esteves quiso recibir con el pie demasiado elevado, por lo que el esférico le pasó por debajo, encontrando finalmente su destino en la parte interna de la red. Así fue como Clube de Regatas de Brasil terminó sentenciando el compromiso gracias a la complicidad de su contrincante.