No hubo lugar para la épica. Con un polémico gol de Benjamin Pavard, Bayern Múnich derrotó 1-0 a Tigres UANL en la final y se quedó con el título del Mundial de Clubes de Qatar. De todos modos, los dirigidos por Ricardo Ferretti demostraron estar a la altura ante el último campeón de la UEFA Champions League.
Como si esto fuera poco, tuvieron un representante en los premios del certamen. Y es que André-Pierre Gignac se quedó con el trofeo de máximo artillero del torneo. Con tres anotaciones en los partidos anteriores, el delantero francés le ganó la pulseada a Robert Lewandoski, quien se quedó con dos dianas.
El futbolista galo utilizó el Mundialito para llegar a sus 147 gritos con la playera del conjunto de Nuevo León. Le marcó un doblete a Ulsan Hyundai de Corea del Sur en los cuartos de final y, días después, le dio la victoria a los regiomontanos frente a Palmeiras de Brasil con otra anotación desde el manchón penal.
Como si esto fuera poco, a André-Pierre Gignac lo premió la FIFA de otra manera. El ente madre del futbol le dio al atacante de los Felinos el balón de plata. Compartió el podio con Robert Lewandoswki, quien se llevó el de oro, y Joshua Kimmich se adjudicó el de bronce.
