Si hay un jugador que se destaca en el mundo por su juego brusco ese es Sergio Ramos, quien ya sido duramente criticado después de la final de la Champions League y su episodio con Mohamed Salah.

Sin embargo, ahora hemos visto un nuevo capítulo sin precedentes en la Copa del Mundo: contra Irán, el capitán de la Selección de España tuvo una situación bastante curiosa con el juez principal.

Cerca del área rival, Ramos pudo rematar al arco desde media distancia, pero justo se cruzo el árbitro uruguayo Andrés Cunha y ¡él le tiró un codazo al de amarillo! 

Aunque todo quedó en la anécdota, en las redes sociales se hicieron eco de la insólita jugada.