El Consejo Mundial de Boxeo ya le tiene preparada a Tyson Fury una defensa obligatoria de su título mundial de peso pesado, que viene de defender con éxito el pasado 9 de octubre en la T-Mobile Arena de Las Vegas, imponiéndose por nocaut en el undécimo asalto a Deontay Wilder en la que fue la trilogía de combates entre ambos.

El retador será Dillian Whyte, que es campeón interino del organismo y que debía haber enfrentado el sábado pasado a Otto Wallin, pero se bajó de esa pelea por una lesión en el hombro que sufrió en el campamento de entrenamiento y que con la oportunidad que ahora se le presenta la dejará atrás.

"La orden del CMB fue muy clara. El ganador de Fury vs Wilder tiene un mes para tratar de asegurar la unificación definitiva contra Usyk, quien derrotó a Joshua. Si no son capaces de hacer eso, entonces el CMB optaría por un retador obligatorio, que es el campeón interino", le dijo Mauricio Sulaimán a TalkSports.

Como Oleksandr Usyk y Anthony Joshua ya están encaminados a tener un combate revancha, será imposible que Tyson Fury pueda tomar un combate de unificación dentro de los plazos establecidos por el organismo, situación que favorece a Dillian Whyte, quien ya pasó dos años sin poder hacer valer su status de mandatorio.

"Hemos recibido de la Junta de Control de Boxeo Británico la certificación médica de que Whyte no pudo pelear contra Wallin debido a la lesión. Así que vamos a hacer lo que prometimos que íbamos hacer y será así como avancemos", dijo para poner fin a cualquier rumor sobre la posibilidad de que Whyte hubiese simulado una lesión para tomar esta pelea.