En el partido correspondiente a la Jornada 16 del Torneo Grita México Apertura 2021 de la Liga MX, el Cruz Azul hizo valer la localía y derrotó por 2-1 al Club América en una nueva edición del Clásico Joven. Con estos 3 puntos, los dirigidos tácticamente por Juan Reynoso se ubican en el quinto lugar en la tabla de posiciones y tienen 1 partido pendiente (vs. León), por lo que dependen de sí mismos para clasificarse de manera directa a los Cuartos de Final de la Liguilla.

La Máquina y el Azulcrema nos regalaron un encuentro lleno de emociones y que se terminó por definir en los segundos finales. Roberto Alvarado abrió el marcador con un gran zurdazo desde afuera del área; Federico Viñas igualó de cabeza tras un enorme servicio de Miguel Layún y Jonathan Rodríguez, cuándo no, fue el encargado de establecer cifras definitivas de penal (minuto 96). Y esto ya se ha vuelto una costumbre...

 

Cabecita se ha convertido en el verdadero terror del América en los últimos campeonatos, por lo que el Cruz Azul decidió trollear a su acérrimo rival en las redes sociales una vez culminado el partido. Con una barra al estilo de Aczino, la cuenta oficial de los cementeros aseguró que lo "Clásico" en este tipo de duelos es que el uruguayo le marque a Guillermo Ochoa. "Un Clásico, Joven", tuiteó con una imagen que habla por sí sola. 

Captura de Twitter @CruzAzul

Captura de Twitter @CruzAzul

Jonathan Rodríguez ha disputado 8 partidos ante el Azulcrema con la playera de La Máquina y tiene números tremendos: le anotó 5 goles y dio 1 asistencia. No solo eso: su equipo ganó en 4 ocasiones, empató en 3 y perdió en solamente 1. Queda claro que es un futbolista que aparece en momentos importantes y contra equipos relevantes, ya que el América es uno de sus rivales favoritos.

 

 

Prueba de ello es que sus números ante las Águilas no eran del todo buenos cuando jugaba en Santos Laguna. Allí disputó 6 encuentros: ganó 1, empató 2 y perdió 3; convirtió 2 goles y no dio asistencias. Cuando fichó por el Cruz Azul allá por enero del 2019, tanto el América como Chivas, por ejemplo, se transformaron en sus víctimas predilectas.