Uno de los momentos que marcó el camino actual de Pumas dentro del Clausura 2023 fue la salida de Andrés Lillini de la dirección técnica. El argentino pensó que le darían un voto de confianza, pero la directiva argumentó demasiada presión por parte de los medios y la afición, por lo que el ciclo se acabó. Para Juan Dinenno, la forma en la que terminó la relación de Lillini con el grupo fue triste, ya que se quedaron muy cerca de conseguir demasiadas cosas importantes.
“Ningún equipo necesita que alguien se quede sin trabajo. Pudo conseguir otra oportunidad para seguir demostrando que está capacitado para dirigir. Fue parte de lo que es el futbol. Es muy complicado que se vayan siempre los jugadores. Andrés compitió durante tres años. Le tocó irse y a mí me pone un poco triste por la forma, pero el futbol es así y hay que continuar. Rafa vino con unas ganas increíbles y con mucha hambre de trascender, la misma que tenemos los jugadores. Desde el primer día se vio que es un objetivo mutuo”, mencionó para TUDN.
Parte del cariño especial que tiene el atacante argentino por el técnico con el que comparte nacionalidad, es que, según Lillini, fue quien lo descubrió en un viaje a Colombia cuando iban a ver a otro jugador. Al volver, Andrés le dijo a la directiva que lo tenían que fichar, y así lo hicieron. El mismo Míchel González, estratega de aquel entonces, mencionó que rogaron durante toda la negociación que ningún otro equipo se enterara para poder hacerse de sus servicios.
Será un duelo de vida o muerte
El equipo que se deje puntos este miércoles en el estadio Victoria se meterá en serios problemas. No sólo porque Pumas y Necaxa ya perdieron las primeras tres unidades en una semana de nueve, sino que el camino cada vez se vuelve más complicado conforme llega la primera mitad del Clausura 2023. Los jugadores de Pumas tienen en sus manos poner la soga en el cuello de su extécnico, o hacerlo ellos mismos de cara al juego ante Chivas.