Al igual que México, Polonia estará disputando un último partido amistoso de preparación este miércoles, antes que ambos seleccionados deban verse las caras el 22 de noviembre en el que será su debut en el Grupo C del Mundial de Qatar que comparten también con Argentina y Arabia Saudita.
El combinado europeo que es liderado futbolísticamente por Robert Lewandowski debía enfrentar a Chile en el Estadio Nacional de Varsovia, pero un insólito problema obligó a un cambio de sede de última hora. SegúnKamil Bortniczuk, secretario de deportes polaco, se detectó“un defecto en la estructura de cables de acero que coronan la parte superior” del techo del estadio, por lo que este quedó inhabilitado para recibir el juego por precaución.
Por esta razón, se decidió que el último amistoso de los polacos previo al inicio de la Copa del Mundo se mude al estadio de Legia, con una capacidad considerablemente inferior a la del Estadio Nacional ya que como máximo podrán ser 31.800 aficionados los que despidan al equipo y no los 51.000 que se hubiesen garantizado en Varsovia.
Quien crea en las energías, podrá notar que la del seleccionado polaco no está siendo la mejor en los días previos a su debut mundialista ante México. Al insólito problema con la sede del amistoso ante Chile hay que sumar la desafortunada lesión que sufrió el porteroBartlomiej Dragowski, quien era parte de la nómina.
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En el duelo entre suSpezia y Hellas Verona, por la Serie A, salió casi hasta el córner para luchar una pelota dividida conKevin Lasagna, con tanta mala fortuna que su pie derecho se trabó con el césped con tanta mala fortuna que terminó provocándole una fractura que lo deja desafectado de la Copa del Mundo.
