Un escándalo protagonizó la mañana de este jueves. Los señalados eran los directivos de la FPF y el Minsa, quienes habían hecho un acuerdo para vacunar a la delegación de la Selección Peruana con vacunas provistas por el Estado.

Resulta que por temas de licencia, las inoculaciones de la CONMEBOL con Sinovac no podían darse y entonces se llegó a un acuerdo para ponerles las Pfizer destinadas a poblaciones vulnerables.

Las críticas llegaron por montón. Esto significaba que muchos mayores iban a dejar de recibir sus dosis para dárselas a los futbolistas. Literlamente, se jugaba con la vida de la gente.

La noticia escaló tanto que el propio ministro salió a hablar. Confirmó que se suspendía el proceso. Los motivos eran evidentes. El escándalo había trascendido gracias a RPP.

Un periodista del Comercio complementó información y habló del entrenador peruano, quien anteriormente se había manifestado con respecto a prioridades: "Suspendidas las vacunas de Pfizer para la Selección. De buenísima fuente: uno de los más molestos e indignados con todo esto es Ricardo Gareca, quien habría mencionado a su entorno que no se iba a vacunar si el tema procedía".

Así, todas las manifestaciones tuvieron repercusiones en evitar una injusticia a todas luces. Ahora, habrá que seguir viendo como sigue el proceso. Todos queremos el fútbol, pero más queremos la vida.