Nuevo escándalo en un Camp Nou que no aguanta más. En medio de las especulaciones y negociaciones para renovar la casa Culé, desde La Vanguardia desvelan que Barcelona puso en peligro a sus aficionados durante 21 partidos tras abrirles las puertas de un feudo que se cae a pedazos. La administración de Josep María Bartomeu era consciente apuntan.
La información data de entre la primavera del 2019 y otoño de 2020, antes de que la pandemia empezase a disminuir hasta el punto cero la presencia de hinchas en el Camp Nou. La Vanguardia desvela que la anterior junta directiva ignoró los peritajes y revisiones del estadio que dieron como resultado que era inviable abrir el recinto durante los tiempos estipulados.
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El Camp Nou se cae a pedazos
Concretamente, Barcelona sabia que su cancha tenía 127 deficiencias en el recinto y 44 amenazas de ver como las tribunas superior se desprendían. Bartomeu ignoró estas advertencias y durante 21 juegos entre 2019 y 2020 abrió el estadio a los socios. La llegada de Carles Tusquets luego de que el expresidente fuese arrestado, habría sido el primer paso para ver que el símbolo de la historia blaugrana está en un estado decadente.
La Vanguardia expresó las sensaciones de los profesionales que estuvieron chequeando la capacidad del Camp Nou para recibir hinchas y este fue el dictamen: “Un riesgo de seguridad para los usuarios del estadio por el peligro de caída del edificio de piezas o fragmentos sobre zonas de paso o de concentración de espectadores”.
En pleno rebate por abordar o no el proyecto Espai Barça y con el Clásico ante Real Madrid como primer encuentro desde marzo de 2020 donde se podrá tener un 100% de aforo, un nuevo escándalo sacude el mundo del Barcelona durante la gestión de Josep María Bartomeu. ¿Tomará acciones Laporta viendo esto?
