El estadio Da Luz fue testigo del empate 2-2 entre Benfica y Ajax, dos equipos que protagonizaron un duelo lleno de emociones y en el que ocurrió de todo. El juego fue válido por la ida de los octavos de final de la Champios League. La llave quedó abierta, para la vuelta en Ámsterdam.
En la previa se veía más fuerte el cuadro neerlandés, equipo que cumplió en primera instancia gracias al buen gol y a la tremenda definición de Dusan Tadic, en al recibir un centro al área grande definió de borde interno al palo más lejano del guardameta griego Odysseas Vlachodimos, a los 18 minutos.
Pero como el partido estuvo de ataque y sucedió de todo, a los 26 minutos del encuentro, el gran goleador de la competición, el franco-marfileño, Sebastien Haller, apareció para anotar en propia puerta y poner el empate a un gol parcial. Centro al área y el balón tocó el pie del delantero que puso la paridad.
Sin embargo, el que es crack, es crack. Cuatro minutos más adelante, el mismo atacante, que juega para la selección de Costa de Marfil, cazó un rebote cedido por el arquero Vlachodimos y con un remate esquinado, puso el que era el segundo tanto para los neerlandeses.
Así se fue la primera parte de un partido que tuvo emociones por doquier y que dejó con ganas de más a los aficionados locales, que esperaban la reacción de sus jugadores para la segunda mitad, algo que efectivamente sucedió en el complemento.
Los dirigidos por Nelson Verissimo tuvieron un cambio de actitud, ya que para la segunda mitad, se vio a un cuadro portugués con otra disposición táctica y con ganas de ir a buscar el partido por sobre encima del equipo que lució el uniforme en homenaje a Bob Marley.
El delantero uruguayo Darwin Núñez fue el llamado a encabezar las mejores ocasiones de gol para los lisboetas, quienes lograron el tanto de la igualdad al minuto 72, por medio del atacante ucraniano Roman Yaremchuk, quien tuvo festejo de gol a rabiar, quitándose la camiseta y mostrando una imagen en apoyo a su país que pasa por un momento altamente complicado en cuanto a lo político y fronterizo con Rusia.
Luego de un remate de media distancia atajado providencialmente por Remko Pasveer, la pelota le quedó servida al ucraniano que de cabeza se anticipó a sus marcadores y de esa manera sentencio el 2-2, de ahí en adelante el juego se convirtió en un ida y vuelta frenético, en el que por desgracia para los aficionados al fútbol no hubo más goles.
Con la igualdad a dos tantos, Benfica y Ajax definirán el partido en la vuelta el próximo 15 de marzo en la capital de los Países Bajos, en el imponente estadio del Ámsterdam Arena. Lo que se espera en dicho compromiso es otra jornada llena de acción como la que hubo en la capital portuguesa.