Los rumores alrededor de lo que se le viene al Liverpool con Mohamed Salah empiezan a convertirse cada día en una mayor realidad en la Premier League. El egipcio continúa sin renovar su contrato con el equipo de Anfield, quienes empiezan a analizar que deben hacer con un futbolista que en su prime, puede representar una importante entrada de dinero en el gigante británico. La tecnología aseguran, resolverá su futuro.
Contextualicemos primero. Con un contrato que finaliza en junio de 2023, Liverpool se ha propuesto renovar al extremo Mohamed Salah, pero no a cualquier precio. El equipo de Jürgen Klopp le considera la estrella de un proyecto que sigue marcando la diferencia en todo el Reino Unido, aunque están lejos de darle lo que pide.
“No veo en este momento un mejor jugador que él”, sentenciaba el propio Klopp antes del parón de selecciones sobre un jugador que en 15 partidos de lo que vamos de temporada, acumula el mismo número de goles y hasta 6 asistencias. La ecuación es clara, Liverpool depende en buena parte de un Salah que no pretende cobrar menos de 30 millones de libras en el último gran contrato de su carrera.
“La tecnología definirá su futuro”
Glen Johnson, ex jugador y compañero de Salah en los Reds desvela que desde ya se empieza a utilizar la Big Data en Anfield para saber si resulta rentable o no desde deportivo renovar por tres o cuatro años a quien a día de hoy ya tiene 29 en su piernas, por 30 kilos por temporada. Aunque parezca descabellado, nadie en Liverpool descarta que a final de temporada haya que romper con los vínculos.
“Sabemos que cuando el Liverpool renueva a los jugadores y cuando ficha a los jugadores, todo es cuestión de números y estadísticas. Sólo lo harán si su ordenador lo dice”, declaraba un Johnson que confesó en ECHO haber llegado y salido del gigante inglés por dichos procedimientos. El futuro de Mohamed Salah, otra incógnita para el mercado de verano que se viene.
