Llegar a ser profesional en el fútbol solo es el privilegio de un puñado de jugadores que aspiran a eso. Más aún, ganarse un lugar y mantenerse en el torneo más competitivo del fútbol europeo: la Premier League.
Kevin McDonald supo ascender en el fútbol británico desde sus comienzos en Escocia y disputó aquel certamen con dos equipos diferentes. Sin embargo, su carrera dio un vuelto de 180 grados cuando los médicos le dijeron que tenía que recibir un trasplante de riñón.
Su hermano tomó la heroica decisión de donarle uno de los suyos al, por entonces, jugador de Fulham en la Premier League, en marzo de 2021. A pesar de que se recuperó con éxito, el camino de regreso a su trabajo fue mucho más costoso de lo esperado
“Tratar de conseguir un club fue horrible. Sin ofender a ninguno de los clubes a los que fui, pero no pensé que tendría que bajar del nivel en el que estaba al que hoy estoy. Algunos clubes lo dijeron claro y tengo respeto por eso, pero hubo algunos que ni siquiera cogieron el teléfono y ese es un caso diferente“, explicó el mediocampista a BBC.
Luego de su cirugía, Dundee FC de la Scottish Premier League le abrió las puertas tras casi un año sin partidos oficiales. Allí afrontó 11 encuentros y disputó la última parte de la campaña 2021-22. En Exeter City regresó a Inglaterra para jugar la última campaña, pero ahora tendrá nuevo equipo.
Es que firmó contrato por las próximas dos temporadas con el Bradford City de la League Two, el cuarto escalón del fútbol inglés. A los 34 años, el objetivo de McDonald es el de continuar desde dónde estaba al momento del trasplante y tendrá trabajo para conseguirlo.
