El portero de Santos Laguna se lastimó la mano durante el partido frente a Puebla, y, como su equipo no tenía más variantes, le dejó su lugar a un jugador de campo y se ubicó de atacante.

Initialize ads

$bp(“Brid_70621844”, {“id”:”6126″,”width”:”100%”,”height”:”400″,”video”:”57936″});

La cuarta fecha del Torneo Apertura 2016 de México ofreció sorpresas, goles, polémicas y grandes partidos. Sin embargo, nada de eso se puede comparar con lo que sucedió en el Estadio Cuauhtémoc, en el partido entre Puebla y Santos Laguna.

Si vamos al trámite del compromiso y al resultado no hay demasiada tela para cortar, ya que el encuentro no tuvo demasiadas luces y culminó con un pálido empate sin goles. Pero hubo un hecho nada común que sorprendió a propios y extraños.

El protagonista de la historia es Agustín Marchesín, portero de la visita, que se lastimó la mano en el transcurso del segundo tiempo, y, como su equipo no tenía más modificaciones disponibles, le dejó su lugar a un jugador de campo y se desempeñó el resto del juego como delantero.