Los Pittsburrgh Steelers no contaban con una selección de primera ronda para este pasado Draft de la NFL, pues lo habían c omprometido en la transacción que les consiguió a Minkah Fitzpatrick. Esto, sumado al poco espaciosalarial, los complicaba a la hora de reforzar los puntos débiles del equipo.

Sin embargo, los aurinegros se hicieron con los servicios de un atleta explosivo y prometedor como Chase Claypool de la Universidad de Notre Dame, tomándolo con el pick 49, su primera seleccion en este sorteo. En este sentido, Ben Roethlisberger expresó su entusiasmo por la llegada de un jugador con tanto potencial:

"Honestamente, no conozco mucho acerca de Chase además de sus números y su tamaño, pero estoy muy emocionado por su llegada. He escuchado que es un buen muchacho, muy trabajador y gran compañero. Estoy seguro de que está emocionado por compartir una reunión de receptores con nosotros y aprender de un gran jugador como JuJu (Smith-Schuster)", declaró el mariscal de Ed Bouchette de The Athletic.

Claypool acumuló 66 recepciones para 1.037 yardas y 13 anotaciones en su última temporada en la universidad. Sin embargo, sus actuaciones en el Draft Combine deslumbraron a propios y a extraños y convencieron a los Steelers de que era el prototipo de receptor que necesitaban.

Con 1.93 metros y 104 kilos, Claypool corrió 40 yardas en 4.42 segundos y registró un salto vertical de 40.5 pulgadas, consiguiendo comparaciones físicas con leyendas del juego como Calvin Johnson. Ahora, tendrá que pagar la confianza del equipo en él con una temporada de novato en la que la expectativa estará a la orden del día.