Un Alfredo Arias contento por la actuación de sus jugadores en La Boca, confesó que el hecho de jugar en el estadio xeneize fue una “experiencia única” y no escatimó en elogios para el volante izquierdo contrario: “Me duele ver en el rival un jugador que juegue tan perfecto”.
A sus 56 años, pese a haber jugado en los grandes clubes de Uruguay, el técnico de Montevideo Wanderers tocó La Bombonera por primera vez ayer de la mano de sus dirigidos en un encuentro que en la previa era desigual, pero en el resultado fue estrecho: “Sólo los títulos, los socios, el presupuesto, el estadio hermoso, la historia, desde ahí partimos en desventaja”. El uruguayo subrayó el trabajo de su equipo y el hecho de irse de la Argentina “con la frente en alto” por la actitud de este, que en el promedio de edad no pasaba los 22 años: “Los botijas (niños) lo hicieron brillantemente”.
En su segundo partido oficial como titular, Nicolás Lodeiro ya desplegó todo su potencial partiendo desde la parte izquierda del campo de juego y demostró la calidad que hace algunos años lo catapultó a Europa. Uno de sus recientes admiradores fue Arias, quien admitió que terminado el cotejo fue a darle la mano para felicitarlo por su “partido excelente”.
El entrenador rescató la ardua actividad de su compatriota para recuperar, aunque en esencia su posición no la demanda, y vaticinó un gran futuro para el sanducero: “Va a ser gran figura, de Boca y de todo el fútbol”. Reconoció que pudo haberse equivocado en el planteo táctico previo, para beneficio de la ofensiva rival, al no ponerle marca personal tanto a Daniel Osvaldo como a Lodeiro.
Testigo en primera persona del perfecto comienzo de Boca en cuanto a resultados, cuatro partidos jugados (2 de Libertadores y 2 del torneo local) como ganados, el técnico uruguayo manifestó que si el conjunto de Rodolfo Arruabarrena “repite estas actuaciones, Boca es amplio candidato a pasar el grupo”.