Si bien deben esperar que se les otorguen los permisos por parte de las autoridades sanitarias del Estado de California, Golden State Warriors ha confirmado que recibirá aficionados en el Chase Center durante la próxima temporada de la NBA.

Para materializar esta intención, según detalla la cadena ESPN, la franquicia de San Francisco ha diseñado la Operación Dub Nation, la cual tendrá un costo cercano a los $30 millones de dólares, y buscará recibir el 50 por ciento de su capacidad total, es decir, casi nueve mil aficionados.

La idea de los Warriors es implementar todos los protocolos de seguridad y salud impuestos por la NBA para dejar el Chase Center en condiciones aceptables para la existencia de distanciamiento social, el uso obligatorio de mascarillas y la realización de exámenes rápidos de Coronavirus.

El plan de los Warriors para recibir fanáticos 
 

"No solo quiero hacer esto y mostrarle al mundo cómo podemos hacerlo ahora, estoy dispuesto a gastar el dinero para hacerlo; este es un problema serio, serio. No puede continuar por varios años ... porque si esto continuara por varios años, la NBA ya no existe", aseguró el dueño del equipo, Joe Lacob.

 

Otra de las medidas que implementarán los Warriors será habilitar un sistema de filtración de aire de última generación, que tenga la capacidad de usar el aire exterior al 100% o purgar el aire del edificio, lo suministre y lo reemplace cuatro veces en una hora si es necesario.

 

 

Ahora, todo esto será en vano si las autoridades de California no aprueban la presencia de aficionados en los eventos deportivos, algo que no ha ocurrido durante la pandemia, y por lo que Los Angeles Lakers ya anunciaron que no recibirán fanáticos en el Staples Center.