Sin lugar a dudas, una de las peores cosas que le pudo suceder a los Golden State Warriors en las Finales fue perder a Klay Thompson, quien, a pesar de lesionarse los ligamentos de la rodilla, regresó al tabloncillo a encestar un par de libres.

Thompson no podrá regresar al tabloncillo hasta febrero del próximo año, lo que representa un enorme problema para un equipo de los Warriors más que acostumbrado a su férrea defensa y toque magistral desde el área de tres puntos.

Es por eso que los detractores de los Warriors consideran que la baja de Thompson y las salidas de Kevin Durant y Andre Iguodala son sinónimo del fin de la dinastía de los Warriors, algo con lo que el escolta no está de acuerdo:

“Creo que es prematuro decir que ya no existe la dinastía. Aún tenemos a Stephen Curry, dos veces MVP. Tenemos a Draymond Green, Jugador Defensivo del Año. Añadimos a D’Angelo Russell, algo increíble para nosotros. Ese chico se convertirá en una súper estrella en esta liga”.

Thompson sigue trabajando en su recuperación y, a juzgar por sus palabras, se encuentre sumamente optimista y confiado del estado físico con el que regresará al tabloncillo, por lo que aprovechó de enviarle un dardo a los que hablan del final de la era Warriors:

“Decir que se acabó la dinastía es algo ignorante porque volveré mejor y más atlético. No es inteligente darnos por muertos, y eso es lo que vine a decirle a la gente”.

Evidentemente, Steve Kerr deberá realizar muchos ajustes a su esquema mientras regresa Thompson, pero, teniendo en cuenta el personal del equipo, se espera que peleen toda la temporada por colarse nuevamente en los playoffs.