Hace más de una semana que se encuentra de vacaciones tras ganar la NBA con Los Angeles Lakers; sin embargo, el ala-pivot LeBron James está viviendo un problema importante para poder descansar como corresponde, y es que no puede dormir plácidamente.
De hecho, fueron varias las ocasiones durante la estadía en la burbuja de Orlando, Florida, donde presentó esta complicación, incluso tras los triunfos en los juegos 2 y 4 de las pasadas finales ante Miami Heat, estuvo hasta altas horas de la mañana en las redes sociales.
Producto de esto, James trató de utilizar un método poco usual pero efectivo para poder conciliar el sueño, y fue ver sus partidos, pero no vio cualquiera, ya que en su cuenta de Instagram mostró que se quedó toda la noche viendo el juego 7 de las finales de 2016, donde el Rey logró el título con los Cleveland Cavaliers venciendo a Golden State Warriors.
LeBron y la mejor final del siglo 21 en NBA
Los fanáticos del básquetbol entendemos a la perfección el porqué se quedó siguiendo este juego LeBron para tratar de dormir, y es que fue nada menos que la mejor final del Siglo 21, donde la franquicia de Ohio se convirtió en la primera en la historia de la liga en revertir una serie 1-3 de playoffs.
"No pude dormir como de costumbre ... Pero resulta que este clásico sigue en marcha. Dándome escalofríos como si no supiera qué pasó", escribió James en la red social.
Vale recordar que en esas finales del 2016, donde obtuvo el premio al Jugador Más Valioso, LeBron promedió 29.7 puntos, 11.3 rebotes, 8.9 asistencias, 2.6 robos y 2.3 bloqueos; mientras que en ese juego 7, marcó 27 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias, más el histórico bloqueo a Andre Iguodala.
