En el pasado, Steve Kerr y Kevin Durant han tenido algunas diferencias, si bien los Golden State Warriors continúan teniendo éxitos en la Conferencia Oeste.

Sin embargo, parece que no existe la mejor relación entre jugador y entrenador, y la superestrella de los Dubs volvió a demostrarlo con sus últimas declaraciones.

Tras la derrota de los Warriors por paliza ante los Celtics, Kerr hizo un llamado a los campeones a jugar con más "rabia" para cerrar los partidos, algo que no le gustó a Durant.

"Pensé que nosotros jugábamos con alegría. ¿Ahora dice que debe ser con rabia? no estoy de acuerdo con eso".

A Durant nunca le ha importado quedar mal por dar su opinión, y esta vez, hizo caso omiso del viejo dicho de lavar la ropa sucia en casa.

Todos los rumores indican que el alero de los Warriors se irá al finalizar la campaña independientemente de si el equipo queda campeón o no, y este tipo de actitudes demuestran que tal vez sea lo mejor para los de la bahía.