A pesar de la victoria de los Golden State Warriors en el primer juego de los playoffs frente a Los Angeles Clippers, el triunfo se vio empañado por la expulsión temprana de Kevin Durant y Patrick Beverley.

Ambos jugadores se enmarcaron en un ir y venir de confrontaciones físicas y verbales hasta que fueron expulsados por una segunda falta técnica, algo decepcionante para todos los fanáticos presentes en el Oracle Arena.

En este sentido,  Durant finalmente mostró  arrepentimiento por sus acciones y se disculpó ante los fanáticos y entrenadores por haber caído en el juego de Beverley, un provocador de oficio y excelente defensor:

"No quiero decepcionar a mis fanáticos y a los propietarios que esperan que yo esté jugando, por  lo  que me disculpo por haber sido expulsado del partido".

El desenlace del segundo partido fue diametralmente opuesto, con los Clippers remontando un  déficit de hasta 31 puntos para llevarse una victoria 135 por 131 en el juego dos de la serie de playoffs.

Además, Durant volvió a ser expulsado del compromiso, esta vez por acumular seis faltas durante todo el partido. Sin embargo, se vio mucho más concentrado en ambos costados de la cancha a pesar de las provocaciones de Beverley.

Ahora, los Clippers deberán ganar todos sus compromisos en condición de local para dejar fuera de competición a los campeones defensores.