La historia de Antonio Brown esta temporada no pudiera haberla escrito ni el mejor novelista. Y es que, prácticamente de la nada, la ex estrella de los Pittsburgh Steelers parece haber perdido la cordura.
Brown causó problemas donde quiera que fue cual tifón. En solo días, destrozó todo lo que tocó y se robó todos los titulares por una enésima cantidad de escándalos, encabezados por uno de agresión sexual.
Es por eso que ni siquiera Bill Belichick y los New England Patriots pudieron hacer milagros con él y, ante la investigación de la justicia y la NFL, no tuvieron más remedio que cortarlo del roster del equipo.
Esto, lejos de apaciguarlo, solo le echó más gasolina al incendio, con Brown amenazando con demandar al equipo, a la liga y a quien sea para exigir hasta el último centavo de su contrato. Luego, amenazó con retirarse, con volver, con retirarse de nuevo, y un largo etcétera.
Desde entonces, Brown ha pedido disculpas a la organización en repetidas oportunidades y lanzado guiños para demostrar que quiere volver al equipo. Ahora, sin embargo, simplemente llegó demasiado lejos.
Y es que, de la nada, Brown posteó un famoso selfie con Tom Brady con el pie de foto “extrañándote, hermanote”, en su cuenta de Instagram; a pesar de que solo estuvieron juntos un par de semanas en el vestuario.
Brown claramente quiere volver a jugar con los Patriots pero es muy poco probable que la NFL le permita colocarse los pads nuevamente. Y, quizás, solo quizás, no merezca siquiera una oportunidad.