Los espectadores del partido entre Pachuca y Tigres acabamos de ver una maravilla.

Lucas Zelarrayán tomó la pelota y comenzó a irse hacia el medio. Antes de llegar a la medialuna del área, remató de forma muy violenta al ángulo superior derecho del arco defendido por Alfonso Blanco.

De esta manera, Los Felinos consiguieron el merecido empate a nueve minutos de que finalice el partido.

Gran encuentro en el Estadio Hidalgo.