La amenaza finalmente se hizo realidad. En la previa al quinto juego de la serie de primera ronda de la Conferencia Este, Milwaukee Bucks, comandados por el astro griego Giannis Antetokoumpo, decidió no presentarse al partido ante Orlando Magic, en protesta contra el ataque de la policía de Wisconsin al ciudadano de raza negra Jacob Blake.
De esta manera, se inicia oficialmente de parte de los jugadores el boicot a los playoffs de la NBA, una situación que venía rondando en la burbuja de Disney World desde que se dio a conocer en los últimos días el atentado policial contra este hombre de raza negra, quien sobrevivió pero no volverá a caminar.
Según dieron a conocer reporteros in situ como Adrian Wojnarowski, de la cadena ESPN, y Shams Charania, del The Athletic, los jugadores de los Bucks llegaron a los vestidores del AdventHealth Arena con la decisión tomada: no iban a jugar el partido, en señal de protesta contra la violencia racial.
Hasta minutos antes de la hora señalada para el inicio del partido (4:00 PM hora del Este), sólo estaban en la cancha los árbitros y los Magic, quienes faltando menos de cuatro minutos para el comienzo, decidieron dejar el campo y así consumar el boicot, lo que provocó el actuar de los máximos ejecutivos de la competición, sin conseguir revertir la medida.
Con esta acción, se pone en duda la continuidad de la postemporada, a la espera de la decisión que tomen Houston Rockets y Oklahoma City Thunder, además de Los Angeles Lakers y Portland Trail Blazers, y también lo que tendrá que decir el Comisionado Adam Silver ante esta situación.
