La Navidad es una jornada para reunirse en familia, celebrar con los más cercanos y pedir por un futuro mejor. Algo que seguramente realizarán en Barcelona ahora mismo hinchas, jugadores, entrenadores y directivos de un equipo que tiene en claro cual sería el regalo ideal para una fecha que siempre resulta especial.

El 2021 del Barcelona supera la ficción de Hollywood, los cambios de guion de Netflix y las rachas más incongruentes. El equipo de la ciudad condal ha vivido de todo en los últimos 12 meses, desde el famoso Gate de Bartomeu, pasando por la crisis económica que terminó en la salida de Lionel Messi y la eliminación en fases de grupos de la UEFA Champions League que por momentos cuestas creer que sea una realidad. Los Culés han tragado golpes de todos los colores y llega la hora de pedir un favor al cielo.

No habrá dinero a corto plazo para traer una estrella de primer calibre, desprenderse de jugadores con una ficha astronómica en su contrato o salir a por todas en búsqueda de préstamos millonarios. Barcelona sabe muy bien para que están sus cuentas y todos en la directiva concuerdan en lo que se pide para los primeros días de enero.

Un killer del área, el regalo para las navidades

Barcelona necesita goles y todos en el club concuerdan. La ausencia de un 9 de garantías empujó al club hacia la Europa League, a la mitad de tabla de LaLiga y a un presente donde meter el balón en la portería contraría se celebra casi que como un triunfo. Nombres hay muchos en los grandes medios, pero de nuevoserá la situación económica la que defina bien hasta donde podrá gastar Laporta.

Los Culés piden a la navidad un killer que ilusione cuando lleguen centros, se den segundas jugadas o el balón sea puesto a metros de la portería. Pensando en un presupuesto más que recortado, nombres como Edinson Cavani, Artem Dzyuba, Marko Arnautovic, Bas Dost o Burak Yilmaz encajarían en ese perfil goleador y de experiencia que se busca en el Camp Nou.