Llegaba el día de hacer cuentas en Barcelona. Con la Asamblea General Ordinaria como uno de los eventos más importantes del 2021 para los Culés, estos se reunieron en las instalaciones del club para discutir distintos apuntes que buscarán cambiar la historia reciente de la entidad. Eso sí, habrá que tener un segundo round.

Con Joan Laporta y su equipo dirigiendo todo desde el Palau de Barcelona, la Asamblea tendrá que volver a realizarse gracias a la proximidad de esta con el encuentro ante Valencia horas después. 60 minutos estuvieron reunidos quienes buscarán sacar al club del pozo en el que se encuentra y estos fueron los principales hechos a tener en cuenta pensando a futuro.

El caso Bartomeu y un referéndum a la vista

“Tenemos las peores cuentas de la historia”, empezaba Laporta a la hora de exponer los 481 millones que se perdieron solo la temporada pasada. Unos que no volverán a corto plazo al Camp Nou y que tienen una relación directa con la gestión del último presidente. El actual mandamás no negó que puedan pedirle que responda ante la justicia. Los socios pidieron a gritos que la situación termine en los tribunales.

Eso sí, Laporta solo lo hará si tiene garantías de victoria en un proceso que saldría sumamente costoso para un club sin dinero: “Me estoy cargando de razones. Si creemos que hay indicios de delito tomaremos las medidas oportunas, pero sólo lo haremos si tenemos plenas garantías de que ganaremos en los tribunales".

Mientras se termina de definir qué ocurrirá con Bartomeu, Barcelona también aprobó los presupuestos de su año más difícil. Apenas ingresarán a las arcas 631 millones, centenares menos que en otras épocas no muy lejanas que obligarán a replantarse varios proyectos como el Espai Barça, que apunta a un definitivo referéndum.

1500 millones necesita el club para su nuevo estadio y si bien todos pretenden que la operación se lleva a cabo, dudan que este sea el momento de realizarla. Pese a las declaraciones de Ferrán Reveter pidiendo apoyo, los socios mostraron sus miedos a que el Espai Barça lleva al club a la ruina. Si no hay acuerdo en una semana, no puede descartase que los hinchas voten en el Camp Nou a corto plazo.