La compra del Newcastle United a manos del Public Investment Fund marcará un antes y un después en la historia del fútbol inglés. 300 millones han bastado para que el Príncipe de Arabia Saudí se quede con uno de los equipos más tradicionales de una Premier League donde el equilibrio entre los grandes y los equipos denominados como ‘medios’ se romperá para siempre. La Superliga ve una luz en el territorio que le ha sido más hostil.
Tras varios meses de investigaciones por parte de la FA y la Premier, finalmente fue aprobada la venta del Newcastle al fondo más rico que el fútbol jamás haya visto en su historia. El PIF trae 320.000 millones de euros en su espalda, así como la promesa de ganar todo a base de talonario. Mientras se empieza a rumorear con los primeros fichajes, el miedo crece entre quienes durante años han luchado por una primera división igualada.
¿A que nos referimos con esto? Sabiendo que su nuevo músculo financiero le hará codearse con los grandes, en Inglaterra preocupa que ese equilibrio contra el Big Six se rompa. Uno que justamente evitó que los clubes pudiesen unirse a la Superliga y que con la entrada de Newcastle, puede dejar de existir.
La norma es simple, para que una propuesta en la Premier prospere necesita la aprobación de 14 de los 20 integrantes de la primera división. Durante los últimos años Chelsea, Liverpool, Manchester United, Arsenal, Tottenham y Manchester City buscaron sin éxito revolucionar aún más la liga, intentado imponer ante la negativa de 14 clubes una competición con menos partidos, que favorezca a quienes juegan en Europa en cuanto a calendario se refiere y que permitiese invertir más dinero.
Con Newcastle saliendo del grupo de los humildes para unirse a la Premier de los magnates que luchan contra el resto, su voto definirá varias de las decisiones que marcarán el futuro del fútbol inglés. La Superliga de Florentino Pérez sonríe, aunque habrá que ver que tanto interés tiene el presidente de Real Madrid en unirse con el polémico Mohamed Bin Salman.