A Boca le alcanza con poquito en la Copa Sudamericana. El año pasado, en la Libertadores, le era suficiente con empatar porque tenía a Chiquito Romero y ahora con solo un gol de Edinson Cavani por serie, le sobra.

Hizo un gol en el repechaje contra Independiente del Valle para clasificarse a octavos, anotó uno de tiro libre de visitante ante Trinidense de visitante en un partido clave de fase de grupos y ahora la historia parece repetirse con su tanto a Cruzeiro en La Bombonera.

Si el año pasado, en la semifinal contra Palmeiras, que es mucho más que este Cruzeiro, le alcanzó para defenderlo en Brasil, yo creo que este 1 a 0, que pudo haber sido más, le va a ser suficiente a Boca para pasar a cuartos de final en el Mineirao.

Esa es la fórmula de Boca: con un golcito del Matador, alcanza.

Por otro lado, hay que analizar a Diego Martínez que con esta victoria salvó la ropa. Estaba alterado, se lo notaba nervioso en el primer tiempo, muy protestón, enfuscado con el árbitro… Pero este triunfo le permite ganar tiempo.

Si pasa de fase, Martínez gana otro mes, hasta que se jueguen los cuartos de final y el Superclásico con River en La Bombonera. Y si pasa ese escollo, logará seguir siendo el técnico de Boca por lo menos otro mes más.

Pero, para que todo esto suceda, necesita avanzar en Belo Horizonte contra Cruzeiro, partido que, me parece, con Marcos Rojo recuperado, y un par de micros atrás, lo va a conseguir.