Cuenta la historia que en el primer partido oficial de la Comisión de Actividades Infantiles de Comodoro Rivadavia, allá por 1994, Sixto Raimundo Peralta le dio el pase y Andrés Silvera convirtió el primer gol. Hoy, uno es dirigente del equipo y el otro es el DT con el que la CAI cortó una sequía de 17 años sin títulos: el fin de semana se consagró campeón de la Liga Regional y sueña con volver a jugar el Torneo Regional Amateur el año próximo.
El Cuqui se sumó al equipo en dupla con Nicolás Segura en julio del 2024. Ya había estado en el cargo, también con su colega, en el Regional 2019, cuando llegaron a la final Patagónica. En esta segunda etapa, logró cortar una sequía de títulos locales que se remonta al 2008. Esta es la novena vuelta olímpica que da el equipo en un torneo que cuenta con otros 19 equipos.
No se suele mostrar demasiado Silvera, de hecho le escapa no sólo a las fotos sino también a las entrevistas. Padre de dos varones -que también juegan al fútbol-, el Cuqui está instalado en Comodoro y maneja como siempre un bajísimo perfil. Tras su debut en 1994, en 1998 llegó a Huracán de Parque Patricios y tras un paso por Unión llegaría a Independiente, donde conoció la gloria por primera vez.
En Independiente fue campeón en 2002, consagrándose además goleador del torneo con 16 gritos. No fue su única vuelta olímpica en el Rojo: tras su paso por México (donde fue goleador de la Liga en la temporada 03/04 jugando para Tigres) y luego de ser campeón con San Lorenzo, en el 2007, regresó al Rojo para ganar la Copa Sudamericana 2009.
En total, en Independiente jugó 137 partidos oficiales, con 44 goles y 19 asistencias. San Lorenzo fue el segundo equipo en el que más jugó: 105 y con un promedio de gol más que interesante, ya que sumó 45 gritos en el club de Boedo. Allí tuvo como entrenador a Ramón Díaz, quien años después lo llevó como ayudante de campo.
Su carrera siguió en Unión, Belgrano y Banfield, cuando decidió colgar los botines en el 2012, con 35 años. Dos años después ya estaba embarcado en su nueva profesión: el Pelado fue presentado como entrenador de Paraguay en diciembre de 2014 y dentro de su cuerpo técnico se llevó al Cuqui. Estuvieron allí dos años y tras su salida, rápidamente consiguieron trabajo.
Así, Díaz y Silvera se fueron para Arabia Saudita para sumir en el Al-Hilal, en octubre de 2016. En marzo del 2018, el entrenador y su CT renunciaron al cargo (Ramón regresaría en 2021 y sería campeón, pero ya sin Silvera).
Una final polémica
Luego de asumir en su segunda etapa, la CAI estuvo muy cerca de subir al Federal A en un año de muy buen rendimiento deportivo pero con el peor final. En la edición 2024/2025 del Regional, accedió a la final de la región en la que venció a La Amistad de Cipolletti y alcanzó el partido definitorio por el ascenso.
Sin embargo, por los incidentes que se generaron en la final con Costa Brava de General Pico se le dio por perdido el partido al equipo chubutense y de esta manera se perdió el ascenso y como sanción se le impidió jugar en el Regional por un año.
Tras el empate sin goles con Petroquímica en el último partido y el título en la liga local, la CAI podrá disputar el año que viene el Torneo Regional y volver a soñar y buscar el ascenso al Federal A. Un objetivo que va de la mano con el trabajo que viene realizando desde hace años en las Divisiones Juveniles: el club se transformó en un semillero patagónico, dándole lugar a muchos chicos de la zona y consiguiendo pruebas en diferentes equipos de Primera para que como les ocurrió a Silvera, Peralta, el Pitu Barrientos y hace no mucho Ian Subiabre puedan soñar con llevar el fútbol patagónico a la gran ciudad.
