Miguel Borja está viviendo horas no del todo felices. En primera instancia porque el experimentado delantero nacido en Tierralta no fue convocado para la Selección Colombia en el marco de una nueva fecha FIFA. Por ende, no estuvo presente en el pasado compromiso contra España y tampoco en el de la jornada de hoy ante Rumania.
A su vez, el exjugador de Deportivo Cali, Cúcuta Deportivo, Cortuluá, La Equidad, Livorno, Olimpo de Bahía Blanca, Independiente Santa Fe, Atlético Nacional de Medellín, Palmeiras, Junior de Barranquilla y Gremio de Porto Alegre no pudo disfrutar de un fin de semana libre y así diagramar una escapada con su familia, tal como estaba estipulado.
Es que, el viernes pasado, River Plate sufrió una durísima paliza en su visita a Independiente Rivadavia en el estadio Malvinas Argentinas de la provincia de Mendoza. Si bien se trató de un encuentro amistoso, el mismo culminó con una derrota por 4-0 que dejó muy mal parado al cuerpo técnico y también a los jugadores que participaron.
Por ende, Martín Demichelis tomó la determinación de dar un golpe de timón y anular los días de descanso para el plantel profesional, los cuales iban a disfrutarse por los protagonistas sábado y domingo. Esto, como no podía ser de otra manera, generó un gran malestar entre los jugadores pero fundamentalmente en Borja.
Otro golpe para Borja
Lo dicho: este martes, la Selección Colombia se encontró frente a frente con su par de Rumania con el Estadio Civitas Metropolitano de Atlético de Madrid como testigo y como escenario. En ese contexto, el encargado del centro del ataque de los comandados estratégicamente por Néstor Lorenzo fue Jhon Córdoba, ariete del Krasnodar de Rusia.
Para colmo de males, cuando transcurrían jugados solamente seis minutos del primer tiempo, el artillero de 30 años de edad y con pasado en Envigado, Jaguares de Chiapas, Espanyol de Barcelona, Granada, Mainz, Colonia y Hertha Berlín abrió la cuenta para Colombia con una muy buena resolución. Mala noticia para Borja.
A su vez, posteriormente, a los 35 minutos de ese mismo período inicial, el propio Córdoba tuvo una participación clave con una maniobra realmente astuta para que su compatriota Jhon Arias aumente distancias y establezca el 2-0 con el que terminaría llegando el descanso en la capital española. Sí, un delantero que aprovechó su oportunidad.